Tipos de agua

Existen diferentes tipos de agua según su procedencia. A continuación, te informamos acerca de los tipos más comunes que podemos encontrar: agua de red y agua de napas o de perforación.  

Agua de red

Estudios realizados en nuestro país indican que la contaminación no solo se presenta en las aguas de perforación. En efecto, las malas condiciones de las instalaciones domiciliarias internas (cañerías, tanques cisternas y tanques elevados o de reserva) pueden determinar la aparición de la contaminación o un sensible aumento de la existente, independientemente de las condiciones de la fuente de agua a considerar.

Agua de napas o de perforación

Las napas son reservorios naturales de agua subterránea que durante milenios han satisfecho las necesidades de los seres humanos. Lamentablemente, en nuestra época, su confiabilidad se ha visto reducida a niveles alarmantes.

Situaciones similares se presentan en otros países de Latinoamérica, donde aún hoy existe una importante porción de la población que no solo carece de agua potable sino que se provee de agua a través de perforaciones hasta las napas freáticas, algunas de las cuales se encuentran con un alto grado de contaminación, en las que el aporte bacteriológico es el de mayor influencia y peligrosidad a corto plazo.

Hay dos factores básicos que intervienen en su contaminación:

  • La filtración de agua de superficie: las prácticas contaminantes que generan los seres humanos a nivel industrial y personal producen residuos diarios y perjudiciales para la salud humana y ambiental. El volcado de efluentes líquidos contaminantes sin tratamiento previo (por parte de las industrias) en los ríos y riachuelos, así como también los residuos domiciliarios que no son debidamente discriminados son causantes de la contaminación de agua de napa proveniente de aguas superficiales.
  • Agricultura y ganadería: estas dos áreas económicas tienen bastante incidencia tanto en la cantidad de consumo de agua que necesitan para sus productos finales como en la contaminación de las aguas. Debido al uso excesivo de fertilizantes orgánicos e inorgánicos que se utilizan en la agricultura el abono sobrante puede dirigirse tanto a las aguas superficiales como a las subterráneas. En el caso de la ganadería, esta tiene su aporte a la contaminación de napas por la filtración del producto de la descomposición del excremento de los animales, los cuales llegan hasta las profundidades arrastrados por las lluvias.
  • Pozos ciegos o negros: este último factor es el de mayor incidencia. Por eso es que los agentes más importantes en el deterioro del agua son biológicos y no químicos. Se originan principalmente en las heces humanas o de animales y están representados por las bacterias, parásitos y virus. Estos microorganismos pueden producir efectos nocivos en el ser humano, (en ocasiones, sumamente graves) y se manifiestan a través de diversas enfermedades tales como infecciones parasitarias, cólera, fiebre tifoidea y hepatitis.
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