Recomendaciones para el uso del agua

Con el objetivo de colaborar con los Distribuidores/as y Usuarios/as de Bahía Blanca, les compartimos los siguientes consejos y recomendaciones sobre el tratamiento del agua.

La situación climática sufrida en la ciudad probablemente producirá un aumento en los niveles de turbidez en la mayoría de los hogares. La turbidez puede darse por la presencia de partículas gruesas que precipitan y se depositan en el tanque, por lo que su limpieza es fundamental. También están las partículas finas: arenas, arcillas, barros y otras afines que permanecen en suspensión por su incapacidad para precipitar. Es detectable a simple vista ya que el agua presenta una coloración oscura.

Ante esta situación, desde PSA recomendamos:

Limpiar el tanque de agua: es un aliado en el hogar ya que obstruye la turbidez más gruesa. Por eso, recomendamos una limpieza adecuada del mismo siguiendo estos pasos:

  • Cerrar la llave de entrada de agua de la casa.
  • Vaciar por completo el tanque: abrir la válvula de limpieza del tanque ubicada en su parte inferior.
  • Lavar las paredes y el piso del tanque con un cepillo, agua y lavandina.
  • Abrir el paso de agua y llenar el tanque.
  • Agregar 2 litros de lavandina concentrada por cada 1.000 litros de agua y dejar actuar como mínimo durante 3 horas.
  • Vaciar el tanque abriendo todas las canillas del hogar para lograr una limpieza general de las cañerías.
  • Colocar la tapa al finalizar.

Dejar correr el agua (ver más)

Puede suceder que cuando abramos la canilla, el agua salga con una concentración de turbidez muy alta. Por eso, aconsejamos dejar correr el agua unos segundos hasta que se aclare, y luego direccionar el paso del agua por el purificador.

Verificar la presencia de cloro (ver más)

El cloro es fundamental para desinfectar el agua porque elimina todo tipo de microorganismos que son perjudiciales para la salud. El aumento de turbidez puede afectar la concentración de cloro, por eso es importante realizar la prueba con el reactivo de PSA. reactivo de PSAHacerla es muy fácil: se llena un vaso de agua hasta la mitad y se le agregan cinco gotas del reactivo de cloro. Si el agua toma una coloración amarillenta, significa que hay presencia de cloro y puede ser tratada por un Purificador PSA. La presencia de cloro da la tranquilidad y seguridad de que el agua está libre de microorganismos. Aconsejamos una concentración mínima de cloro de 0,5 ppm.

Aumentar la frecuencia del retrolavado (ver más)

El aumento de turbidez genera taponamientos tempranos en el Purificador PSA, por eso es necesario aumentar la frecuencia de los retrolavados. Esta práctica permite eliminar parte de los sólidos retenidos y también las burbujas provocadas por el atrapamiento de aire. También el retrolavado descompacta los medios activos y evita que se apelmacen, lo que permite un correcto funcionamiento del equipo.

Mirá en estos videos cómo realizar el mantenimiento y retrolavado: PSA Senior4 -  PSA Senik - PSA s1000 2

Cambiar el elemento filtrante (ver más)

El Fipor® n. ° 3 y el cartucho bacteriostático retienen físicamente las partículas en suspensión. Esto hace que, en determinado momento, los poros del filtro se tapen y se saturen, lo que produce la obstaculización del paso del agua. Cuando esto ocurre es necesario cambiarlo por uno nuevo. El indicador que anuncia la necesidad del cambio es una disminución mayor al 50 % del caudal de agua de salida del purificador, siempre y cuando esta disminución no pueda ser revertida por un retrolavado.

Tiempo aconsejado de llenado de 1 litro: 

  • Senior4: 36 segundos
  • Senior: 36 segundos
  • S1000 2: 15 segundos
  • Vero: 36 segundos
  • Mini: 45 segundos
  • Senik: 45 segundos 

Mirá en estos videos cómo realizar el mantenimiento y retrolavado: PSA Senior4 -  PSA Senik - PSA s1000 2
 

Elementos filtrantes PSA

Los elementos filtrantes tienen como principal función la retención de sedimentos y partículas en suspensión. Así, se evita que las partículas con un tamaño de poro mayor al del Fipor® n. ° 3 o cartucho bacteriostático entren en el cuerpo principal del purificador, donde podrían taponar los medios activos. De esta manera, se optimiza el rendimiento y la vida útil del equipo.

Observar la coloración adquirida por el elemento filtrante permite presumir qué problemáticas están presentes en el agua:

Puede suceder que el Fipor® permanezca blanco y esté tapado por retención de:

Partículas incoloras.
Partículas blancas.

Fipor® sucio que indica retención de tierra, arenilla, barros, etc. 

Indica retención de algas y/o materia orgánica en suspensión en el agua por:
Falta de cloración o cloración insuficiente en el agua de entrada.
Purificador expuesto al sol (evaporación del cloro en el interior del prefiltro).
Falta de limpieza del tanque de reserva.

Fipor® saturado, extremadamente sucio por retención de tierra, arenilla, barros, etc.

Indica, principalmente, la retención de partículas de óxidos, entre otras. 

Fipor® que retuvo restos de hidrocarburos que, junto con la materia en suspensión, forman una pasta. 

Paño un micrón

La turbidez generada por coloides y partículas muy finas puede ocasionar taponamiento de unidades en un corto tiempo de uso. Es por esto que diseñamos un paño de poliéster para retener partículas de hasta 1μm de tamaño. El paño se coloca envolviendo el cartucho bacteriostático, con el logo PSA hacia afuera. El accesorio cuenta con velcro en cada una de sus caras para facilitar el cierre.

El paño de un micrón optimiza la duración del cartucho bacteriostático y protege la vida útil de la unidad purificadora evitando la oclusión de los medios activos.

Ante la continuidad de los altos niveles de turbidez, se puede anteponer al purificador el PSA Stopper SM, un filtro de agua diseñado para retener las partículas gruesas de todo tipo de sólidos en suspensión.